sábado, 14 de marzo de 2015

1.605 Viajes con Ximo Iglesias

DEJEN PASO

Abran la puerta a los de siempre, a los MEDIOCRES. Que entre el aire rancio, que el conformismo se instale para siempre. Que los malos políticos vuelvan su sonrisa a los malos sindicalistas.

La mediocridad ya es un bastión defendido por gárgolas de arcilla que asustan a la inteligencia. El contagio se extiende desde las Cortes hasta los talleres, desde los palacios con infantas hasta las asambleas de taxistas.

La sociedad es una, grande y llena de mierda. Los zombis se pasean en busca de otros zombis, estos ya no se alimentan de cerebros, solo se alimentan de entrañas. Así andamos todos, con el virus de la MEDIOCRIDAD. Es el estigma de los falsificadores, de los que repiten lo mismo para no crear nada nuevo. Es nuestro mundo la cloaca de los cobardes, de los que no dicen las verdades, de los que no responden.

Allí están sentados en sus sillones, esos sillones sin posa brazos, no les hace falta. Apoyan sus palabras podridas sobre la cara de los ilusos, de los ingenuos y de los palmeros.

Ya me tienen harto, los unos y los otros. Son iguales, son MEDIOCRES. Temen la verdad y la modifican, hablan de hacer para no hacer nada. Los observó con la boca abierta esperando que no me entren moscas. Pero me entran moscas, grandes y verdes. Sucias en sus patas y en sus alas, son las sílabas de los mentirosos, de los cobardes que esconden la verdad. Vienen de beber la sangre de los taxistas muertos. Los mismos que se suicidan en las asmbleas pegándose tiros en las ruedas.

miércoles, 11 de marzo de 2015

Ética normativa

Hay dos tipos de leyes: aquellas que quieren hacen más ricos a los ricos y aquellas que hacen menos pobres a los pobres.
Al igual que las leyes y los economistas solo miran hacia un objetivo, que es la riqueza y el crecimiento económico, así la sociedad debería mirar cómo luchar contra la lacra del sistema capitalista. La desigualdad sigue creciendo, y no solo la de España con respecto a otros países, sino que, entre los propios españoles, la brecha entre ricos y pobres sigue en aumento.
Por lo tanto, el cambio no debe consistir  solo en ofrecer caras nuevas, sino  proyectos nuevos y encaminados hacia una transformación real de la sociedad.
Hay propuestas que se deberían incorporar en todos los partidos políticos que quieran esa transformación.  Según mi criterio, son las siguientes:
1. Prohibir a los bancos especular por cuenta propia para evitar la propagación de las burbujas y cracks.
2. Reducir la liquidez y la especulación mediante el control de los movimientos de capitales.
3. Limitar las transacciones financieras a aquellas que respondan a necesidades de la economía real.
4. Aumentar de forma muy notable la fiscalidad a las rentas muy altas para desalentar la búsqueda de rendimientos insostenibles.
5. Desarrollar una política de crédito público a las empresas, para reducir su dependencia respecto de los mercados financieros.
6. Hacer transparente la deuda pública, desvelando su origen y la identidad de los principales poseedores.
7. Sancionar a todos los bancos de España que tengan participaciones o hayan especulado con bancos en paraísos fiscales.
8. Incrementar el gasto en educación, investigación y ecología para crear condiciones de sostenibilidad y descenso del paro.
Podría seguir enumerando muchas más medidas que, al menos a mí, me gustaría ver en los programas electorales. Pero será difícil- dirán ellos- llevarlo a la práctica, ya que los poderes fácticos, que todos sabemos quiénes son, nos lo van a poner muy complicado.
Estamos en una sociedad donde mis hijos no tienen los mismos derechos ni oportunidades que los hijos de los más ricos. Me explico con un ejemplo fácil de entender: si los hospitales  fueran todos privados, con gestión y economía privada,  ¿alguien me puede decir de quiénes serían los hijos o familiares que  entrarían a trabajar en esos hospitales? Por supuesto que serían los hijos del director o directivos de esos centros.
Además, mi hijo, por ejemplo, por ser de padres trabajadores,  tendría muy difícil ser médico, ya que no hay casi becas y, si no fuera muy bien en la carrera, no le podríamos pagar profesores o academias privadas para poder mejorar su rendimiento.
Los más adinerados pueden permitirse prestarles ese apoyo a sus hijos y también que tarden más años en terminar la carrera, ya que tienen el puesto asegurado y no tienen penurias económicas. Así que mi hijo solo tendría la oportunidad de ser médico en un hospital público, a no ser que algún amigo lo pudiera enchufar en el privado. Pero creo que nadie quiere una sociedad donde el enchufismo sea la forma de encontrar trabajo. ¿O sí?
Y recuerda: todo lo que hemos dicho es subjetivo, al igual que tu pensamiento también lo es.

domingo, 8 de marzo de 2015

ÉTICA NORMATIVA

Hay dos tipos de leyes: aquellas que quieren hacer más ricos a los ricos y aquellas que quieren hacer menos pobres a los pobres.
También hay dos tipos de democracias, la directa y la representativa. Esta última es la que tenemos en España, ¡de momento!
La democracia directa se empezó a ejercer en la antigua Grecia, en el periodo de Pericles, hace 2300 años. La soberanía la tenían las asambleas, de donde partían todas las leyes y los cargos públicos, y era un deber y honor participar en ellas.
En la actualidad hay países como Suiza y, en ciertos cantones, que siguen practicando la democracia directa. Es decir, se van a un lugar al aire libre y deciden, con sus votos, los presupuestos o leyes que deben seguir. ¿Por qué aquí seguimos con la democracia representativa? Será que esto es una democracia donde lo importante es que los ciudadanos no decidamos nuestro destino. Que así tengamos políticos profesionales, mediocres y vendidos al poder fáctico. Eso sí, son artistas del engaño y la demagogia permanente, además, no tienen escrupulos en mentir cuantas veces haga falta.
¿Por qué tenemos dirigentes sindicales que siguen mintiendo, y llevando al abismo al sector del taxi? La última manifestación del taxi fue por la corrupción de nuestro sector, por la quiebra, y porque se pedía otra regulación. ¿Alguien sabe qué otra regulación se demandaba?¿Los que convocaban no eran los de 12 horas para todos? Según algún lider iluminado, debe ser la administración quien ponga la regulación que sea mejor. ¿Para quién? Para ellos hay más taxis que nunca, y si los sindicatos proponen como única alternativa saltarse las leyes, será dificil que nos hagan caso.
También me asombra que en la pancarta principal no estuviera el eslogan de poder votar los taxistas en urnas otra regulación. ¿Quiere decir que estos dirigentes ya no se fían del taxista? Creo más bien que no quieren reconocer sus fracasos y las mentiras que fueron las últimas votaciones.
Si dicen que está en quiebra el taxi, ¿entonces la promoción y la congelación de tarifas también es un fracaso? ¿Quién responde de las perdidas por no subir las tarifas? Todos fueron con la misma canción a decirles a los taxistas que con esas medidas íbamos a tener más faena y mejor calidad de vida. ¡Vaya que si tenemos todo eso! Por eso mis ingresos siguen bajando, y mi horario sigue aumentando. ¿Dónde están esos 500 € más que se ganaba gracias al reloj? ¿Alguien dimitirá por todos estos errores? Creo que no, el sueldo que tienen hoy en día es muy goloso como para dejarlo escapar por una mentira o un error de varios miles de euros que ha perdido el sector. Además, como dice Góngora: "Ande yo caliente y ríase la gente".
Lo mejor de toda esta situación grotesca son los compañeros que siguen acudiendo a las manifestaciones y luchando por cambiar el sector. Para ellos, mi admiración, y espero que no caigan en la depresión, después de volver a no conseguir nada. Y ya van varios años. Lo único positivo es que cada vez engañan a menos, y ese puede ser el principio de un cambio de verdad.
Solo pido que dimitan los responsables, que no saben dónde van y dónde llevan al sector. Que lo hagan por todos los compañeros luchadores, y reconozcan que ellos no están preparados para esta lucha.
La esperanza que tenemos es que otro taxi es posible, que podemos salir de esta crisis con dignidad y más fuertes que antes.
Y recuerda: todo lo que hemos dicho es subjetivo, al igual que tu pensamiento también lo es.

Por Luis Monsoriu.